Eje y caja de grasa(Locomotora Baldwin Landaluce).
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GUIAS Y CAJAS DE GRASA.-
GUÍAS.-
Las guías son las piezas que alojan y conducen a las cajas de grasa, permitiéndoles un movimiento vertical en conjunción con la suspensión. También evitan el contacto directo de las cajas con los bordes del chasis, y cuyo roce podría provocar un rápido desgaste de las mismas. Pueden fabricarse por medio de piezas de casting (normalmente bronce), o con trozos de ángulo o pletina de acero, Sea cual fuere el sistema, las guías irán siempre fuertemente fijadas al bastidor por medio de tornillos o remaches. Por otro lado la mecanización de las ranuras viene bien detallada en la sección "chasis y bastidores".
Dado que la distancia entre los ejes es crítica, las guías deberán se fabricadas con gran precisión para que las cajas de grasa y sus ejes queden bien centrados, espaciados y a escuadra con los laterales del bastidor, todo ello a fin de evitar que en el caso de montar bielas acopladas estas golpeteen o se traben.
La guías se mecanizan normalmente en la fresadora utilizando fresas frontales, procurando que tanto sus caras internas como los extremos interior y exterior al chasis tengan las medidas adecuadas indicadas en los planos.
CAJAS DE GRASA.-
Son piezas cuadradas o rectangulares que pueden deslizarse a lo largo de las guías, presentando un taladro central atravesado por el eje. Pueden estar hechas de castings o bien de bloques de bronce, latón o aluminio. Excepto si se utiliza el bronce, con el resto de materiales es conveniente hacer una cajera para alojar un rodamiento, ya que si un bronce bien lubricado da buenos resultados como rodamiento directo con el eje calibrado, los otros materiales pueden sufrir un rápido desgaste, especialmente en el caso del aluminio.
Excepto si se utiliza un rodamiento, las cajas suelen presentar en su parte superior un engrasador por gravedad consistente en una cavidad con un taladro fino concéntrico y bien alineado con el centro del eje para lubricarlo.
En los laterales se fresan en sentido vertical unos recesos de anchura igual al del grosor de las guías para evitar que se salgan de ellas. No obstante estas ranuras deben presentar una cierta holgura (sobre-medida) en sus extremos con respecto a la guía, para permitir un ligero desplazamiento radial o axial. Esto es muy necesario para absorber tanto las irregularidades de las vías, como para minimizar, hasta cierto punto, cualquier pequeño error de fabricación.
Es esencial que los taladros centrales para alojar los ejes, o en su defecto las cajeras para los rodamientos estén perfectamente centrados. Si los ejes quedan fuera de escuadra el tren de rodaje golpetearára o se trabará, de forma análoga a si el chasis estuviese mal mecanizado o mal montado, como ya fue comentado en el apartado anterior.
La mecanización del taladro central se puede mandrinar al torno sujetando la caja en el plato de tres garras, centrándolo con un casquillo hecho exprofeso como fue explicado en otro apartado de ésta sección.
Las cajas de grasa pueden llevar las suspensiones tanto arriba como abajo. Para mas detalles consultar el capítulo "Suspensiones".
Bisel delantero (Locomotora Baldwin).
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RUEDAS DE APOYO Y BISELES.-
Las locomotoras pueden montar uno o dos ejes de giro libre en cada extremo. Estos sirven tanto para el reparto de los pesos por eje como para el guiado de la locomotora en marcha. También hay algunas locomotoras articuladas tipo mallet o garrat que disponen de ejes libres en algunos puntos intermedios de su parte central, y que para efectos prácticos de éste capítulo siguen las mismas pautas de montaje que los mas comunes y clásicos delanteros y traseros aquí descritos con mas detalle.
Algunas locomotoras tanque de medidas reducidas y con poco empate (distancia entre ejes), pueden montar un eje loco (delantero, trasero o ambos), directamente en cajas y guías fijas al bastidor, aunque en dicho caso las manguetas tendrán una holgura lateral mayor para permitir que la máquina se inscriba bien en las curvas de radio reducido.
Como ya se comentó, los biseles pueden llevar uno o dos ejes montados tanto en el frontis como en la trasera de la locomotora. Van siempre instalados en un sub-chasis giratorio parecido a un bogie, donde incorporan la clásica suspensión vertical (unas veces una por eje, otras una integral para todo el carro), y en ocasiones otra horizontal para suavizar las sacudidas de trazados muy sinuosos o en mal estado. Carecen de sistemas de frenado.
Se suelen mecanizar primero los laterales del sub-chasis con pletinas, para espaciarlos y sujetarlos luego con tornillos usando tirantes o largueros de modo análogo a los bastidores principales. En ciertos casos y dependiendo de la habilidad del modelista, los sub-chasis se fresan directamente de un bloque macizo. Los biseles deben llevar otro larguero superior mecanizado a espejo para que sirva de punto de amarre y giro con el chasis principal por medio de un bulón que puede ser solidario tanto al propio carro, como emerger del bastidor principal (Consultar planos en cada caso).